Con solo modificar nuestros hábitos de gasto energético en el hogar, podremos reducir fácilmente nuestra factura de la luz y además y sin darnos cuenta, estaremos colaborando con el cuidado del medio ambiente.
Hoy en el blog de Bricoelige, tu tienda de material eléctrico online, queremos darte unos sencillos consejos para que puedas ahorrar energía a la par que ahorras económicamente.
Consigue un ahorro energético con estos sencillos consejos.
1. Aprovecha la luz natural siempre que sea posible e instala interruptores divididos, así podrás encender solamente la luz que necesites en cada momento.
2. Apagar la luz al salir de cada habitación puede representar hasta un 25% de ahorro en la factura.
3. Sustituye tus lámparas por bombillas de bajo consumo o por bombillas LED. Aunque son bombillas más caras que las halógenas de toda la vida, a largo plazo pueden suponer hasta un 80% de ahorro en el gasto que haces por iluminación.
4. Cambia gradualmente tus viejos electrodomésticos por otros de consumo eficiente: Clase A, A+, A++. Éste debe ser un requerimiento siempre que tengamos que comprar uno nuevo en el futuro.
5. Evita dejar los aparatos electrónicos en stand by, hacerlo puede llegar a suponer un 10% del consumo de nuestra factura. Por ejemplo la televisión, que por poco que se use se lleva una importante cantidad de energía. Al mantenerla en modo stand by, tal como se continúa haciendo en muchos hogares, implica un considerable gasto energético por parte del aparato que sigue estando en alerta para recibir nuevas órdenes.
6. Desenchufa los cargadores cuando no los estés usando. Una simple acción como desenchufar los cargadores de nuestros móviles cuando no estés cargando, alarga su vida útil y evita un gasto innecesario. ¿A que no lo sabías?
7. Carga al máximo de sus capacidades el lavavajillas y la lavadora y, siempre que puedas, lava con baja temperatura. Aprovechar cada puesta en funcionamiento de este tipo de electrodomésticos, te permitirá ahorrar considerablemente.
8. Regula la temperatura del frigorífico y elimina periódicamente la escarcha acumulada en el congelador. Se recomiendan las siguientes temperaturas para congelador / nevera: -21º / 4º.
El frigorífico es el electrodoméstico que más energía consume.
9. Al usar la vitrocerámica, busca siempre el recipiente de tamaño adecuado para cada placa: no pongas una olla pequeña en una placa de mayor diámetro. Y, siempre que te sea posible, cocina con las tapas, sobre todo para hervir. Esto hará que no hagas uso de la campana extractora de humos, que aunque no es de los electrodomésticos que más consumen, sí que supone en muchos casos un gasto innecesario.
10. Evita abrir el horno cuando esté en funcionamiento si no es necesario. Cada vez que lo abres, la temperatura interior desciende un 25% y necesitará consumir de más para recuperar esa temperatura. Si lo apagamos 5 minutos antes de lo que indiquen nuestras recetas, el calor residual terminará la cocción y ahorraremos un poco más en nuestro consumo.
11. Desconecta el aire acondicionado cuando no haya nadie en casa, porque para obtener el frío deseado solo harán falta unos minutos. Al encenderlo, no ajustes el termostato a una temperatura más baja de lo normal, hacerlo no hará que la estancia se enfríe más rápido y sólo estás produciendo un gasto inútil.
Los cronotermostatos programables reducen el gasto energético de tu hogar.
Convertir estos pequeños gestos en parte de tu rutina diaria es una apuesta ganadora. Además, tu bolsillo y el medio ambiente te lo agradecerán.