Métodos de ventilación efectiva en el hogar.

Realizar una ventilación efectiva diariamente es un gran método de ahorro en cualquier hogar. Ventilar la casa, y sobre todo en esta época del año, es una actividad que se hace obligada en cualquier hogar, y es que es vital si queremos limpiar el aire que respiramos. Además de esta ventaja elemental, si se realiza esta actividad de manera adecuada, se puede conseguir un ahorro energético considerable, y en consecuencia, un ahorro en nuestras facturas.

¿Queréis conocer nuestros consejos para realizar una buena ventilación?

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Antes de nada, hay que saber que ventilar es la única manera de renovar el aire del hogar, y para evitar que la humedad y las sustancias nocivas se acumulen en el interior de las viviendas. Además es fundamental para bajar la temperatura en verano y mantener el nivel de confort olfativo de sus ocupantes.

Ventilación efectiva como rutina diaria.

La mejor forma de conseguir una  ventilación óptima es con la ventilación natural de aire cruzado. Este tipo de ventilación es el más común y se consigue con facilidad abriendo las puertas y ventanas que se encuentren en lados opuestos de la casa. De esta manera se crea un contraste rápido de temperatura y de presión que permitirá a su vez disminuir el consumo energético necesario para volver a calentar la casa. Este modo de aireación es el más práctico en los meses de invierno, cuando más nos preocupamos por que la casa no pierda su calor pero que a la vez esté bien ventilada.

En los meses de verano no siempre es posible lograr una temperatura confortable con esta ventilación natural. El aire acondicionado y el uso de ventiladores son los métodos más comunes para lograr la temperatura deseada en esta época del año. El Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) recomienda establecer en el hogar la temperatura  de refrigeración del aire acondicionado en 26 grados.

Si se establece una temperatura razonable dentro del hogar se logran beneficios notables como un aumento de confort en la vivienda, un ahorro energético y económico y se evitan los cambios bruscos de temperatura de interior a exterior, que muchas veces provocan resfriados y malestar físico.

En cuanto al tiempo necesario para una buena ventilación depende de la estación del año en la que nos encontremos. De todas formas, se recomienda realizar una ventilación de entre diez y veinte minutos como mínimo, cada día, y más concretamente por las mañanas. Si por cualquier motivo no se pudiera ventilar la casa durante este tiempo por la mañana, ventilar el tiempo que transcurre hasta salir de casa, aunque sea menor. O bien, ventilar en cuanto se llegue a casa por la mediodía.

¿Qué estancias necesitan una mayor ventilación?

Los dormitorios son las zonas que mayor ventilación necesitan, ya que son las que más CO2 contienen. Gracias a una buena ventilación (30 minutos) en cuanto nos levantamos de la cama, eliminamos todo el CO2 que se genera durante la noche mientras dormimos.

Si tu baño o baños cuentan con ventana, lo ideal es ventilar durante 10-15 minutos diariamente. Éste es el tiempo mínimo recomendable para secar la humedad y que desaparezca el vapor concentrado tras un baño o una ducha.

La cocina es otra estancia del hogar que debe ser ventilada de manera casi obligada, siempre y cuando cocines y comas diariamente en la misma. Conviene ventilar un intervalo de unos 10-15 minutos una vez se acabe de cocinar, de esta forma ayudas a que se renueve el aire y desaparezcan los olores concentrados.

Ventilaciones continuas durante todo el día: error muy común.

Se suele tener la idea de que tener ventilación continua durante todo el día es algo beneficioso. Sin embargo, está demostrado que mantener una ventilación parcial con alguna ventana entreabierta durante todo el día es un error, ya que, y sobre todo en invierno, enfriará excesivamente la casa y podrá generar humedades en los marcos de las ventanas.

Se aconseja realizar ventilaciones repetidas de unos 5 minutos las veces que haga falta durante el día.

Regenerar el aire de una vivienda es una acción elemental para el bienestar de los que conviven en ella. Como has podido ver, respirar un aire renovado en tu casa es algo que se puede lograr con acciones muy sencillas que no requieren de gran esfuerzo.

¡FELIZ VERANO!